Description
- - - - ❰❰ PERFIL DE PERSONAJE ❱❱ - - - -
♫ Theme || ► Battle Theme - Hero
♪ Voice Actor || ► Crispin Freeman
[ Nombre ] Vincent Leroy
[ Edad ] 25 años
[ Cumpleaños ] 28 de Julio (Signo: Leo)
[ Peso / Talla ] 1.88m/88kg
[ Ciudad de Origen ] Nalalia (Onicia)
[ Clase Inicial ] Recluta de Hachas
Arma Personal - Dragon Poleax - Un hacha de empuñadura larga para mejor manejo en movimiento. [ Mt | Hit | Crit | Eff -- ]
Habilidad Personal - Fiery Blood - Si su HP no está al máximo, causa Daño+4.
Stats Personales
Str 5 | Mag 0 | Skl 5 | Spd 5 | Lck 0 | Def 5 | Res 0 | Mov 5
HP 20% | Str 55% | Mag % | Skl 55% | Spd 55% | Lck 10% | Def 55% | Res 5%
[ Clase de Preferencia ] Wyvern Rider
[ Clase Secundaria ] Barbarian
[ Armada ] Lotus Knights- - - - ❰❰ BIOGRAFÍA ❱❱ - - - -➤ [ PERSONALIDAD ]
⸨ serio - directo - agresivo - solitario - temperamental - arrogante - rencoroso - vengativo - territorial - persistente ⸩
Frío, reservado, distante... Ha vivido en soledad desde hace algunos años y está acostumbrado al aislamiento humano. Esto lo ha convertido en una persona de instintos, defendiendo su espacio y sus presas ante todo lo que se avecine. Ha perdido el tacto para hablar con otras personas y por eso prefiere no ser él el que lleva una conversación; hablará lo que se le pida y callará el resto por carecerle de importancia. Es muy centrado en sí mismo, pocas veces se interesará por agradarle a los demás y no actuará mucho a menos que se lo pidan. Suele compararse a sí mismo con un animal entrenado para la caza, manteniendo sus instintos de supervivencia, pero con la capacidad de seguir las órdenes que le asignen como parte de su deber. Es un tanto inexpresivo por su falta de contacto humano estrecho, pero no por ello es un amargado, la mayoría de las interacciones sociales le parecen incomprensibles y simplemente no sabe cómo seguirlas.
En el campo de batalla hay muy pocas cosas que lo detienen cuando ya han comenzado a mostrarse sus impulsos combativos motivados por sus instintos de supervivencia. Para él, el combate es igual a todas las hazañas que deben realizarse para sobrevivir en las frías montañas de Onicia, no importa el cansancio, no importa el dolor, debes seguir de pie para no morir. Respeta mucho a las personas que muestren más fuerza o astucia que él, no es competitivo en ello siempre y cuando no se metan con lo suyo, no le es necesario demostrar que siempre tiene la razón o que puede realizar cualquier proesa. Punto y a parte, cuando alguien se mete con lo suyo (moral o físicamente) no dudará ni un instante en defenderlo a toda costa, lo que lleva consigo es lo único que le queda en el mundo y no estará dispuesto a perderlo... aunque sólo hablemos de su hacha y capa, sigue siendo una persona demasiado territorial. Lo mismo sucederá cuando forme lazos y sienta que sus allegados se encuentran amenazados. Es de esas personas que jamás olvida lo que le hagan, jamás perdona una traición... Por ello mismo, no se siente nada cómodo al tratar con nobles. Si se llega a presentar la ocasión en que deban defenderles estando en la Armada, quizá no lo hará de la manera más fácil para ellos, sólo por mostrar su inconformidad, pero sin desobedecer a sus superiores.
La mayoría de las veces preferirá estar solo en lugar de participar de las actividades recreativas dentro de la Armada. Se le podrá ver en una esquina observando todo o de plano, fingirá estar enfermo o con otros deberes para faltar. No es que le moleste la compañía, es que no sabe qué hacer cuando la tiene. Cuando alguien llegue a sacarle de sus casillas, será un completo infierno el tratar de calmarle cuando exploten todas las emociones que ha contenido por tanto tiempo... lo mejor será huir rápidamente si aquello sucede. Si llega a formar algún lazo, será la persona más brutalmente honesta con ellos... Principalmente por su falta de comprensión sobre las emociones de otros y es algo que deberá de ir aprendiendo a prueba y error debido al remordimiento de no saber cuando hiere a otros. Es más fácil que muestre su enojo cuando está preocupado por alguien, sólo que es muy orgulloso para admitirlo y ocultará sus emociones tras insultos y uno que otro golpe. Gustos & Disgustos :
✚ ... En realidad no disfruta casi nada de la vida, pero sí tiene "preferencias"
✚ Carnes rojas, entre más crudas, mejor para él comerá oso como Frederick
✚ A pesar de que subsiste principalmente de la cacería, le gustan mucho los animales y otras criaturas
✚ Aunque lo niegue, su debilidad son las mujeres tiernas tiene algo por las clérigas, güey
✕ La muchedumbre, la peor parte de su día es visitar el comedor con tanto bullicio
✕ Los nobles, desprecia a cualquier persona con título, no los saca de "cobardes"
✕ Las personas en extremo feliz o confianzudas, no va a dudar en golpearles si se molesta
✕ Que la gente invada su espacio personal, lo mismo con sus cosas
➤ [ HISTORIA ]
Disclaimer: Fire Emblem tiene historias muy obscuras y personajes muy trágicos, así que quise aprovechar al máximo esta oportunidad y consulté unas cosas con la administración para no desviarme tanto de la idea del grupo. De hecho pregunté si debía poner todo en la ficha o mejor lo guardaba en sta.sh... Muchos les advertirían por tener una historia larga, yo se los advierto además por tener una historia un tanto densa, y mi horrorosa redacción. Lo único obligatorio de leer es lo que se encuentra en los últimos tres párrafos.
|| ► The Scion's Dance in Purgatory
Hace algún tiempo existió una familia muy poderosa en Onicia poseedora de algunos de los recintos más famosos de la capital, Avicia que conocida por su vida nocturna y sus célebres espectáculos artísticos para propósitos turísticos. Aquella dinastía era conocida por sus grandes festivales y fiestas donde aparentemente no existía límite alguno. En aquellas reuniones se congregaba la alta alcurnia, los excesos, lujuria y despilfarro no hacían falta y los más grandes escándalos se mantenían bien ocultos entre las paredes de aquellos teatros. Mil y un cosas se rumoraban sobre lo que sucedía en aquellos lugares, pero bien se decía que cualquier nueva estrella en ascenso que deseara triunfar en el mundo del espectáculo aspiraba a ser invitado a tales galas para poder codearse con la nobleza y empezar a hacerse de renombre entre los ricos y poderosos para facilitar sus futuras carreras.
La tradición se continuó hasta el último heredero anfitrión, el más desenfrenado hasta aquel momento. Un apuesto y joven vizconde que no conocía un no por respuesta y conseguía todo lo que quería gracias a su inagotable fortuna y persuasiva personalidad. Un hombre arriesgado, amante de las apuestas y un conquistador por excelencia que desposó a una famosa bailarina en la boda más esperada de los últimos años. Un evento del que se habló por meses durante su preparación y tras su culminación en el más grande teatro de Onicia. Pero eso no le detuvo de seguir en las andadas de fiestas, alcohol y amoríos turbulentos. Se cree que tuvo una incontable cantidad de hijos, de los cuáles sólo reconoció a uno, su primogénito concebido con su esposa, los demás obtenían dinero de su parte para ganar el silencio de sus madres. Los lujos y placeres de este sujeto no conocían límites, siguiendo con su loca vida sin importarle el riesgo o dolor en el que pusiera a su familia con tal de seguir complaciendo sus insaciables deseos o caprichosos lujos.
Su esposa siempre estuvo al tanto sus infidelidades, por lo que su única felicidad residía en su hijo, a quien trató de alejar de los peligros y vicios de la vida de su padre. Más de una vez su poca estabilidad se vio amenazada por los familiares de las amantes que no se conformaban con el soborno recibido por parte del padre. Si aquel heredero engendrado con su esposa llegara a desaparecer, la fortuna en custodia sería peleada por las decenas de hijos bastardos que no reconoció, una buena táctica para las avariciosas mujeres que se metieron con aquel multimillonario para escapar de su miseria fácilmente. A pesar del ambiente hostil, ella siempre trató de darle todo su amor a su hijo, manteniendo un semblante bondadoso y una sonrisa brillante en su rostro para borrar cualquier pena y ocultarle toda la horrible verdad. Por parte del padre, él quería lo mejor para su hijo en cuanto a lujos y renombre se refiere, quería que fuera orgulloso, poderoso y un digno sucesor de su fama, legado y apellido. Así fue como el joven heredero del vizconde fue criado en dos ambientes totalmente distintos, con el cariño de su madre y el temor de los celos de las amantes de su padre por un lado, y la hipocresía creciente y la desenfrenada vida de su padre por el otro.
Cuando el menor cumplió los 15 años fue presentado a la sociedad para seguir los pasos de su padre y se le comenzó a permitir asistir a aquellas fiestas, siempre y cuando cumpliera con la misma confidencialidad pactada entre todos los asistentes. Así fue como éste descubrió en qué consistían las famosas fiestas de máscaras que organizaba su padre, la fachada perfecta para ocultar un circo donde se veían directamente los crímenes, traiciones, pecados y los actos más inmorales sin descubrir la cara del perpetrador ni la de los morbosos testigos que se convertían en expectantes cómplices. A diferencia de su padre, él terminó asqueado de lo que vio, las imágenes pasaban tan rápido frente a él, una tras otra, el desenfreno, la pasión, la avaricia, todo lo que su madre había tenido que guardarse para sí y ocultarle, se desenvolvió crudamente ante sus ojos de manera prácticamente simultánea entre las carcajadas y gritos eufóricos de su padre y los demás presentes. Ni en sus más horribles pesadillas hubiera podido imaginar aquel perverso y retorcido mundo.
Lamentablemente, sabía que debía aparentar el disfrutar de aquello para hacerse más cercano a su padre y no perder su favor, al fin y al cabo hijos le sobraban, más sólo tenía un heredero y creía que para no darle más preocupaciones a su madre, debía seguir siéndolo. Siempre asistió con un aire de grandeza, prepotencia, alardeo, evitando que otros se acercaran lo suficiente a él. Dudaba y desconfiaba de prácticamente todos, sólo se interesaba en alguien si es que podía sacarle provecho o para seguir aparentando su despreocupación ante tal estilo de vida. Los demás nobles de Onicia querían hacerse parte de su círculo cercano por interés, por su parte, él sólo sabía ser hipócrita con ellos y, aunque estaba consciente que esta estrategia sólo le conseguiría más envidias y posibilidades de traición, no deseaba hacer otra cosa más que seguir con ese falso juego para minimizar las posibilidades de seguir los pasos de su padre. Siempre le costaba mantener su descarada sonrisa ante los más inhumanos y repugnantes actos que se sucitaban en tales exhibiciones.
Todas estas falsas relaciones le pesarían el día que se descubrió el más grande secreto de la familia Leroy y sus deslumbrantes fiestas. Algo inclusivemente peor a lo que ya había visto con sus propios ojos. ¿De dónde salía la aparentemente inagotable fortuna? Las personas no deben de ser tan inocentes para creer que de buena fe se invitaba a artistas novatas a aquellas veladas. Se les engañaba y enredaba con sueños de fama, fortuna, éxitos y se enlistaban sin saber en la red de tráfico y prostitución de mujeres que más dinero movía en el mercado negro al ser la favorita y más oculta forma de los nobles para satisfacerse sin correr muchos riesgos. Siempre eran chicas jóvenes de muy bajos recursos que nadie terminaría extrañando y que a la primer sospecha harían callar a los entrometidos con una buena suma de dinero. ¿Cuál era el fin de las muchachas pervertidas por estos señores? Obviamente, la fosa común, al terminar su corta carrera entre las sábanas al no verles un mayor y mejor uso con el tiempo. La más grande debilidad de Maxime Leroy, última cabeza del legado aún a sus 47 años, era su facilidad para aún verse seducido por las jóvenes que se presentaban a sus fiestas. Su gran perdición fue el desear para sí mismo y sus aberrantes deseos a la hija de un reconocido noble a quien terminó secuestrando para hacer suya y finalmente estranguló tras su imperdonable acto. Rompiendo la primer gran regla de oro de su propia mafia, se levantaron las primeras sospechas para descubrir sus crímenes al momento en que la familia de la chica alzó la voz pidiendo justicia. Si se hiciera una lista de las más horribles historias de Asgartha, fácilmente el escándalo de los Leroy aparecerá entre los primeros lugares.
El desenlace de la tragedia se vio durante la celebración del XXIX Festival anual de Avicia, donde cada recinto tendría su propio line-up y su propia fiesta abierta para los turistas y otros visitantes. No era de esperarse que Maxime, ignorando que la investigación en su contra había comenzado y creyendo que su fortuna y renombre bastaría para seguir ocultándolo, se dispuso a ofrecer la más grande fiesta que se hubiere conocido en Asgartha hasta esa fecha. Vincent Leroy, su único heredero, acababa de cumplir los 18 años cuando se suscitó la captura de aquel nefasto vizconde frente a todos los presentes de la celebración. Siendo ejecutado públicamente frente a los ojos de los atónitos asistentes al evento. El infierno continuó cuanto estos se amotinaron, era obvio que las personas no aplaudirían ante las atrocidades cometidas por los Leroy y más aún al sentirse cómplices por asistir al lugar. Los defensores y los detractores comenzaron a buscar justicia por sus propias manos, llevando al caos y terminando en una revuelta que incitaría a un gran enfrentamiento en el que se perderían muchas vidas y se apresarían a todos los miembros de la familia Leroy. La mayoría fueron condenados a ser ejecutados, Vincent, el hijo directo del más sanguinario líder, sufrió otra suerte, no con tener suficiente al ver la muerte de sus parientes, fue apresado junto con el resto de los descendientes y marcados como traidores de la nobleza. No recuerda con exactitud el momento, simplemente el agudo dolor en su rostro y su visión completamente vuelta carmesí de la sangre que fluía por su herida. Fueron hechos presos por otras familias nobles y torturados hasta la muerte o locura, él, siendo el mayor su generación de primos hermanos y lejanos, fue el único que sobrevivió a tales inhumanos tratos durante poco más de un año después, cuando finalmente se probara su inocencia. Las noches en el calabozo, los latigazos recibidos, la hambruna y la humillación que vivió jamás dejarán de atormentarle, sus propios gritos de dolor resuenan en su cabeza aún y con ello creció el rencor, despreciando todo lo que su padre representaba; la avaricia, el despotismo, la corrupción y la inmoralidad.
Al volver a su hogar, se encontró el lugar en ruinas. Las familias de las innumerables víctimas saquearon e incendiaron el lugar, dando paso a la muerte de su madre, concubinas de su padre y medios hermanos restantes, no sin antes haber recibido primero inhumanas torturas que finalmente vieron su fin bajo las envolventes llamas alimentadas por la sed de ciega justicia de los perpetradores. Ahora estaba solo y desamparado, llegó a tenerlo todo, a estar parado en la cima de la sociedad sólo para caer estrepitosamente en lo más bajo de ésta. Para este momento ya no le importaba ser encontrado por los asesinos de su madre, sabía que estarían en todo su derecho de odiarle y a todo lo que simbolizaba, ya que todo lo que le habían quitado a él no era comparable con lo realizado por su padre y su sucia ascendencia. La herencia que tanto anhelaba y pretendía se había esfumado de la noche a la mañana, las propiedades de la familia habían sido clausuradas y todo lo que restó había comenzado a ser repartido entre los afectados y víctimas de aquellos grotescos delitos. Ya no tenía a donde ni con quien ir a lamentar las pérdidas, su mejor final hubiera sido morir tal como su madre o el resto de su familia, inclusive por su propia mano… Pero sabía que eso sería sólo huir de la responsabilidad, aún que no estuviera directamente involucrado, sabía que su padre nunca fue un hombre recto y no tuvo el valor para enfrentarlo. Si algo le había hecho ganarse tal destino, fue su cobardía para no enfrentar a su padre y su aparentemente escrito destino. Muchas cosas pudieron haber cambiado para él y para su madre de no haberle apostado a su suerte, pero a estas alturas ya no le quedaba otra opción más que afrontarlo... si ya había caído una vez por ser cobarde, no volvería a repetir su error y cargaría con el sufrimiento de vivir tras esa decisión y tratar de hacerle frente.
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Cargando con aquella marca en su rostro y arrastrando el apellido de los Leroy era imposible que volviera a integrarse a la sociedad, por lo tanto sólo le quedaba exiliarse, buscar un lugar que nadie hubiere reclamado y vivir de lo que se produciera en esa tierra. De esta manera fue como terminó en las crueles montañas de Nalalia, en la cordillera cercana a Estesia conocida por su inhóspito ambiente. Aquellos rumores eran lo que Vincent buscaba, un lugar solitario al que no se acercara cualquier intruso. Le fue difícil aprender a sobrevivir en un lugar como ese, donde la naturaleza era cruel y se debía respetarle, temerle y al mismo tiempo poder desafiarle. Conforme iba conociendo más de la dureza del ambiente, se fue adentrando más en la montaña, aprendiendo a cazar como su principal forma de supervivencia. No era inteligente ir y perseguir sus presas con su hacha en mano, así que fue desarrollando su experiencia para crear trampas, su astucia se agudizó más que su fuerza durante sus primeras temporadas en el lugar. Su segunda gran arte aprendida, sería la obtención y uso de leña para establecer un refugio, mejorar sus trampas de cacería y la creación de fuego. Finalmente, cuando aprendió a curtir pieles y su materia prima comenzó a sobrarle, volvió a bajar de la montaña después de casi tres años para distribuir su mercancía en diferentes puntos de Nalalia.
Vincent ya se había acostumbrado a la vida de exilio, pero sabía que de esa forma no terminaría su tormento. Se había convertido en todo un hombre de montaña, un ávido cazador y criador de especies, un ermitaño por excelencia y alienado social por presión. Sabía que jamás volverá a ser bien visto en Onicia y no le hubiera importado si no fuera porque, debía comenzar a sacar provecho de sus nuevas capacidades y trató de volver a reinsertarse en sociedad. Durante otros dos años supo que todos le miraban con temor y algo de lástima pero continuó su trabajo sin sentir un verdadero rechazo directo por su bajo perfil y poca interacción. Aún así no podía arrancarse los sentimientos de culpa y traición que nublaban su mente y hacían sus días un tormento. Las cosas pudieron seguir así por más tiempo, siendo visto como un extraño, casi una leyenda de las montañas, pero la movilización militar ya había comenzado a afectar la economía de la ciudad, así como se avecinaban grandes tormentas que dificultarían su trabajo y anularían su único y pequeño ingreso necesario para subsistir durante las crueles temporadas donde era imposible cazar.
Tras mucho meditarlo llegó a la conclusión que ya no podría continuar con ese modo de vida que poco a poco le seguía carcomiendo, así que decidió darle un nuevo uso a su hacha. Vendió su última producción para poder acondicionar su arma para la batalla, empacó algunas pieles y se dirigió a Engelia, la capital nacional para unirse al llamado militar. No va al lugar con esperanzas de ser un salvador ni mucho menos un protector, si no que estará más tranquilo sabiendo que su vida no estará directamente a merced de otros ni de las decisiones de los nobles. Si muere en batalla, serán por sus errores, no por los de algún mal estratega o por alguna emboscada en Nalalia, igual si vive, no rendirá tributo ni agradecerá a un falso héroe o algún líder que sólo dio órdenes. Cree que después de los horrores que ha vivido, lo que viene no podrá superarle y se siente preparado para sobrellevarlo... quizá inclusive sea así, sólo con un nuevo sufrimiento, que pueda despejar el que actualmente le consume el alma. No busca redención a su pasado, ni mucho menos un nuevo futuro, simplemente un tolerable presente que desea aclarar con un nuevo y duro ambiente.
- - - - ❰❰ EXTRAS ❱❱ - - - -
➤ [ RELACIONES / APOYOS ]
➤ [ CURIOSIDADES ]
- Cuenta la leyenda que peleó contra un oso a mano limpia... jamás lo ha negado ni aceptado.
- Su capa está hecha de piel y cuero reales por lo que es muy pesada y la usa para cubrirse del horrible frío de las montañas de Onicia... No ondeará heróicamente en el viento a menos que esté en una ventisca.
- La cicatriz que lleva en el ojo derecho se la hicieron el día que destituyeron a su familia, todos los varones fueron "marcados" como traidores para evitar que vuelvan al poder por algún matrimonio con alguna noble. No la oculta, si eso hace que los demás le tengan miedo y se alejen, mejor para él.
- En mi headcanon eso lo hace que sea visto como un mal "partido" y ya perdió la esperanza en el amor y se conforma con mantenerse vivo
- A los animales que caza trata de no lastimarles o hacerles sufrir de más, no es sádico y no disfruta de su muerte, simplemente es la forma en que vive.
- Heredó el color de cabello de su padre y los ojos de su madre yer a recruit, Vincent
- Planeaba no volver a poner un pie en Avicia ni en su antiguo hogar, pero sabe que es probable que con la guerra deba hacerlo y ya no le importa.
- Tiene pesadillas recurrentes sobre su pasado, pero ya no le atormentan, ha aprendido a lidiar con ello y cree que es parta de la culpa que debe cargar.
- Se sorprenderán del conocimiento que poseé en cuanto música o artes, es lo menos que se esperaría del antiguo heredero de recintos en Avicia.
- De igual forma, conserva algo de los otros idiomas que aprendió en Avicia, nunca los llegó a dominar y gracias a la falta de uso ya son muy básicos.
- Repudia totalmente cualquier abuso de poder y es una de las pocas veces que se le verá defender a alguien más por voluntad propia.
- Nació en Nalalia, el lugar de origen de su madre y donde actualmente reside, la antigua residencia Leroy se encontraba en Avicia.
- Si mi plan de hacerlo Wyvern Rider se cumple, su montura se llamará Fafnir.
- Acomodé sus crecimientos para ser lo más parecidos a los de Haar en el Radiant Dawn, porque es una #beast /shameless
- El hombre es un cazador, será odiado por los Kitsune/Wolfski/Taguel, ya lo presiento... Como nota al márgen les digo que acabo de notar este hecho, no fue con intención.
- No sé si soy sólo yo, pero siento que la ficha está algo chica y no le hace justicia al pobre hombre, así que les dejo los HD aquí -?-
- Fueron demasiadas las inspiraciones que tomé para su cutre historia que ya las olvidé, pero pueden tratar de adivinar y así yo trato de recordar.
- Me decidí en dejar toda la historia ahí porque en teoría fue un crímen muy sonado en su época, de nada me sirve usar la vieja confiable de "más con el rol" porque perdería el impacto que le quiero dar en mi headcanon, por eso lo dejé sin que fuera obligatorio para entender su presente actual.
- Personalmente odio la paleta de colores con la que terminé... pero era parte de la idea que fuera poco llamativa, conforme vaya promocionando y desenvolviéndose, podrá tornarse más heróica o más lúgubre. Lo mismo creo que haré con su tema musical, para que no quede siempre con los de Berkut (que amo, pero no quiero que tenga el mismo final).
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